Finales del s. XIX. Desde 1875.
Desde 1875-1892 casi todos los viñedos de Burdeos quedaron arruinados por la plaga de filoxera. La industria del vino en la región fue rescatada por los injertos de vides locales en resistentes portainjertos estadounidenses. Todas las vides de Burdeos que sobreviven hoy en día son producto de esta medida. Algunas variedades de uva respondían mejor al injerto que otras y estas variedades –cabernet sauvignon, cabernet franc, merlot, semillón, sauvignon blanc y muscadelle- se convirtieron en las variedades líder en Burdeos.
Una parte de estos injertos se llevaron a cabo desde Haro, de variedad tempranillo. Este tren representa aquellos envíos, que supusieron las primeras líneas ferroviarias en España.