Tuve ocasión hace años de disfrutar por primera vez de estos mercadillos navideños en unos días nevados, repletos de gente, con el olor a almendras garrapiñadas, salchichas, vino dulce,… y me quedé enamorado.
En concreto, el mercado de la catedral y el de detrás del ayuntamiento son fantásticos.
En años sucesivos he podido volver varios años y ya nunca los vi nevados, pero el encanto siempre se mantuvo.
Con el paso del tiempo, he ido comprobando que muchos de los puestos repetían y que en alguno de ellos incluso se acordaban de tí y te llenaba una sensación de estar casi en casa,…
Si no los conocéis, no os lo perdáis. Es una uténtico must see.
via Mercado de navidad de Colonia – LocuraViajes.com.