Hay una plaza en Pau, capital de los Pirineos Atlánticos, que es el centro de la vida neurálgica de esta preciosa ciudad. Allí están los almacenes Lafayette, la tienda Apple, restaurantes, tiendas de ropa,… un poco de todo. Es la plaza Georges Clemenceau.
Siempre me ha llamado la atención las flores tan bonitas que hay en cualquier época del año. La verdad es que en eso los franceses son más cuidadosos.
Para comer os recomiendo el restaurante alsaciano de una de las esquinas. No cierra a mediodía, lo cual resulta útil para los españoles y puedes probar un poco de todo: ostras y marisco de Arcachon, flamenkuchen de Alsacia, buenas carnes del Pirineo,…