Cuando uno visita una ciudad por primera vez, en especial si es monumental, tiene la tendencia a estar mirando continuamente hacia arriba. Una puerta, un ventanal, un detalle, una iglesia, un palacio,…
A veces miramos al suelo y nos encontramos esta maravilla. Trabajo precioso y curioso porque se encontraba en una ciudad alemana: Coburg, en la Alta Franconia (al norte de Nuremberg y no lejos de Chekia).