Arte marinero

El ojo del cielo

Recorriendo el mundo solo con su guitarra

Boda en Split

Reunión familiar

Filosofía popular

Five minutes to bloom

Tras los pasos de Diocleciano

Callejas de Split

Los romanos han tomado Split ¿o han sido los turistas?

Plaza España de Mostar

Plaza emblemática de los desastres de la guerra de los Balcanes.

Desde el edificio alto de una de las esquinas los francotiradores acribillaban todo lo que se movía, sin piedad, sin pausa, sin sentido.

Al otro lado de la plaza edificios medio derruidos, con mil un huecos en las paredes del millón de disparos que sufrieron en sus paredes, dejándolos como una piel que ha sufrido viruela.

Y un poco más allá, cruzando el río Mostar el palacio en el que se alojaba el mariscal Tito, creador de Yugoeslavia y que duró lo que duró él.

El Gimnazija Mostar, Gimnasio Mostar queda hoy, con su rehabilitación cuestionable, pone un tono de contrapunto a los edificios no restaurados para el recuerdo histórico.

Boiling Turkish coffee in Mostar

Sí, yo también saqué la foto del salto sobre el río Mostar

Please, don’t forget 1993

Las ventas no van bien

El continuo deambular de turistas es continuo.

Desde las primeras horas, con tenue luz en que van apareciendo los aficionados a la fotografía que buscan las primeras luz para conseguir la composición original a los turistas nocturnos, en pos de ese sabor de las ciudades que solo se precia de noche… cuando todos los gatos son pardos.

Y entre medio ¿qué si no?. Turistas y más turistas.

Con niños y sin niños. En grupo o individualistas. De mochila o de tacones.

Al final es una procesión variopinto de gente que habla en mil idiomas y que se relaciona en inglés. Pues al final el inglés ha conseguido lo que no supo el esperanto. Que todo el mundo, independientemente de su origen, de su condición, de su formación,… hable, mejor o peor, el inglés.

Pero hoy no ha habido suerte… otra vez. Y las ventas no van bien.

Quizás los recuerdos «originales» de la guerra cada vez atraen menos pues cada vez quedan más lejos.

Habrá que ir pensando en cambiar, como el vecino de enfrente, a mochilas floridas, piezas de cobre y bolsitas de lavanda.