Paimio flowers. Tuberculosis bloomed.

Catedral de Turku. Lujo a otra manera.

¿Elefantes en Finlandia?

Museo Aboa Vetus & Ars Nova de Turku

Patos gigantes en el Aura

Lo que quedó tras el incendio

Pureza

No queda comunicación

Soledad, ¿Divino tesoro?

Turku, recuerdos de un pasado más glorioso

Turku
Turku, antigua capital de Finlandia

Turku/Åbo es la ciudad más antigua de Finlandia. 

Y  mientras Finlandia dependió de la corona sueca fue capital administrativa, política, religiosa,… del país.

Tras la guerra contra el Imperio ruso, que ganaron estos, decidieron trasladar la capital a Helsinki, por entender que tenían mucha vinculación en Turku con los suecos, además de proximidad.

Hoy en día, salvo en el ámbito religioso, en el resto, pese a ser una ciudad importante, ha sucumbido a la eclosión de la capital.

Paseando por sus calles se respira una cierta melancolía, en los edificios, en el caminar de sus gentes, en las aguas del río Aura… que nada tiene que ver con el bullicio de Helsinki en los alrededores de la estación del ferrocarril en hora punta.

Arquitectónicamente tiene algún punto d interés, como la catedral o el ayuntamiento, pero el conjunto no justifica, a mi entender, una visita.

Además, salvo hacia Estocolmo, no se encuentra de camino hacia otros puntos de interés, como Laponia o, en el caso de Helsinki, San Petersburgo o Tallin.

Aunque si os toca ir, no dejéis de recorrer las orillas del río Aura, donde se encuentran los edificios más significativos, todos ellos de esa época anterior, cuando era la gloriosa capital de Finlandia.

Searching for a good breakfast

Searching for a good breakfast. Or maybe a late dinner.

On my last trip to Finland ten days ago I had the opportunity to enjoy / suffer the so-called «midnight sun», which does not come to nightfall for several weeks, almost two months.

This phenomenon gave me the opportunity to get up early and go sightseeing in daylight hours that would be nocturnal in other parts of the planet.

And on one of those walks I went at five in the morning in a park located just behind the Wäinö Aaltonen Museum of Art.

I would love to know if the sounds, the animal walks, … were diurnal or nocturnal. How does the midnight sun affect the animals?, Do they suffer from depressions for it like humans do?

And the squirrel I photographed, was she looking for breakfast or dinner?. Great dilemma, do not you think like me?

Regardless of all these speculations, having a park just for you, with the stillness of the ponds, the rocking of the leaves by the gentle wind… it was a beautiful experience.

And that’s what matters. Because traveling and traveling you don´t always have the opportunity to do something really different. Not in vain, I´m a boy from the north of Spain … in southern Europe. And we did not enjoy / suffer the midnight sun there.

In fact, although it was a beautiful experience, I will not miss it.

Searching for breakfast
I can’t find my breakfast

Cariño, he encontrado la casa perfecta para nosotros

Brotes de esperanza

A las puertas de la felicidad

Estás viviendo tu vida y, de pronto, algo sucede que lo cambia todo. Una persona que conoces, una situación que vives, un cambio en el trabajo…

Lo que antes era monótono, moviéndose en una escala de grises, pasa a ser diferente, con mil colores y diez mil y cien mil tonos.

Antes pasabas junto a un niño que lloraba y pensabas qué mal educado está y te contrariaba. Y ahora piensas pobrecillo, ¿qué le dolerá?. Quizás tenga hambre.

Como quiera que el mundo es exactamente igual antes que después, lo que está claro es que lo que cambia es nosotros mismos, nuestro estado de ánimo…

Así que intentemos cada mañana asomarnos a la ventana, ver lo precioso que es el día, gritarle al mundo buenos días y decirnos a nosotros mismo que vamos a tener una magnífica jornada.

Estás a las puertas de la felicidad. Depende sólo de tí quedarte fuera o cruzarlas y ser plenamente feliz.

El resto vendrá solo. El niño volverá a llorar, las cosas se darán mejor o peor… pero la botella ya empezará medio llena.

La hélice que mueve mi barco

De morados y violetas