Papá, mamá, mi hermana y yo

My favourite animal

Flores de invierno

Rincones del valle de Tena

Rosa amarilla, testigo del chaparrón

It all depends

Lince con hambre

Nubes bajas en el Pirineo

Vida en pareja

Naturaleza voladora

Maravillosa criatura

Mariposas en el campo

Papillon

Soportando una y mil tormentas

Son esos tejados antiguos, desgastados por la lluvia, por el viento, por la nieve, el granizo,…

Soluciones de otra época como colocar una piedra para que la lasca más expuesta a las inclemencias soporte los ataques atmosféricos.

Y sin embargo, ahí perduran, sin alambre que sujete, sin ningún tipo de ayuda humana más allá de la que participó para colocar la techumbre.

Definitivamente antes de hacían las cosas con el ánimo de que perduraran y no con el manto efímero que ahora envuelve todo, hasta las relaciones entre las personas.

 

Alta y erguida

Las redondas chimeneas del Pirineo aragonés, con sus espantabrujas coronándolas, se alzan aquí y allá, recordando los antiguos lares.

Generalmente más anchas y más bajas, de vez en cuando encuentras alguna como esta de Larrede, en los preámbulos del valle de Tena, más alta, más erguida, más majestuosa, como queriendo recordar a los visitantes que aquí hubo y hay poderío.

Una maravilla para la vista y seguro que con un bien tiro que hará las delicias de los cocineros de la casa.