Soy un forofo de la serie House of Cards. Me apasionan las intrigas alrededor de Frank Underwood. De hecho, mi ringtone es el del protagonista de esta serie.
El 4 de marzo vuelve en la que será su cuarta temporada. Seguro que está apasionante.
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Soy un forofo de la serie House of Cards. Me apasionan las intrigas alrededor de Frank Underwood. De hecho, mi ringtone es el del protagonista de esta serie.
El 4 de marzo vuelve en la que será su cuarta temporada. Seguro que está apasionante.
Tomado de Microsiervos
Mami Lou Cupcake es un pequeño café en Bilbao, cerca, muy cerca del Guggenheim, que merece la pena conocer. Está en la calle Barraincúa, 7.
Lo descubrí por casualidad, tras una larga mañana de visita turística andarina y una comida de pinchos por las 7 calles. Y fue tan inesperado como satisfactorio y reparador.
Desde que te asomas a la puerta tienes la sensación de cruzar el umbral de un salón de té en la campiña del Yorkshire, allá por los años 50. Ya dentro, la decoración, los utensilios, la materia prima,… los productos que se ofrecen,… todo parece transportado al centro de Bilbao desde el otro lado del canal de la Mancha.
El ambiente es relajado, la música muy agradable, el servicio amabilísimo y la carta amplia y todo riquísimo: cupcakes, cheesecakes, tartas y bizcochos caseros, cafés, chocolates, batidos… Todo elaborado por ellos, según la fórmula de cupcake bakery tradicional.
Hasta Natalia, que junto a Alain, lleva el negocio, parece una inglesita recién aterrizada. En honor a la verdad, es húngara. Detrás de todo no está el espíritu de la abuelita del cottage inglés sino Ludovika, abuela del belga Alain y que da nombre al salón.
Se han escrito muchísimas reseñas sobre Mami Lou y no se suele mencionar la especial selección de cervezas que ofrece. ¿Te suena raro? Ni te imaginas el maridaje perfecto que alcanzarás si pruebas uno de sus pastelitos de chocolate con una Framboise Lindemans o con una Chocolat Floris. Tienen media docena de cervezas belgas, con sabores frutales, que te sorprenderán.
El espacio es pequeño pero con muchísimo encanto. Apenas 4 ó 5 mesas. Hay unas mesas más escaleras arriba. Y además siempre te puedes llevar lo que te apetezca y disfrutarlo tranquilamente en casa. La ambientación no será la misma pero…
A must see.
Mira su página: Mami Lou Cupcake
“Esto está escrito para certificar que Dimitri bin nikola, un dhimmi -un no musulmán en el Imperio otomano-, residente en el barrio Balıkpazarı de la ciudad de Bursa, tiene una piedra en la vejiga y se presentó ante el cirujano Cerrah Seydi Ali bin Berekât es-Seybî para que se la quitase. Ante el tribunal de la Sharia en presencia del cadí pagará 300 akce (monedas de plata) por la extracción de piedra y Dimitri no demandará a Seydi Ali si sufre algún daño e incluso si pierde la vida debido a la eliminación de piedra”: bin Hasan hacı Abdullah bin Ali Kemal (Fecha: 26 de Dhu al-Qi’dah 933).
Publicado por Javier Sanz en Historias de la Historia.
Es verdad que no es un servicio disponible en todas partes, pero ahí está: Hire a Goat Grazer, con cinco estrellas de tres clientes y que ofrece la posibilidad de contratar cabras para que limpien las hierbas y la vegetación en terrenos y jardines,
A las cabras les encanta comer todo tipo de vegetación que para nosotros resulta invasiva, fea o perjudicial incluso peligrosa, incluyendo los cardos, la hiedra venenosa o las ortigas. Un profesional reconocerá la vegetación y le hará saber si las plantas que desea eliminar forman parte del menú de las cabras.
Fotos y vídeos preciosos.
Leído en el blog «101 lugares increíbles»
Curiosa utilidad de los drones, que no paran de sorprendernos: El Lightpainting.
Una maravilla.
“When I look inside and see that I am nothing, that is wisdom. When I look outside and see that I am everything, that is love. And between these two, my life turns.”
~ Sri Nisargadatta Maharaj
Emulando la vieja tradición de Apple…
Aristóteles una vez dijo:
«La poesía es más profunda y filosófica que la historia»
En este caso un poema podría explicar y ejemplificar aspectos para entender mejor determinadas temáticas, por ejemplo las cualidades de un líder; quien, como refiere Agustin Arieu es «la persona capaz de inspirar y asociar a otros con un sueño». Pero, ¿Cómo lo hace?
Aquí entra a tallar la actitud que el líder adopta para involucrar a un grupo en la consecución de un fin; definiéndose como capacidad de mando y que según sus características puede ser: autocrática, democrática, paternalista, proactiva, entres otras tipologías.
Esa capacidad de mando, buena o mala, genera influencias significativas en las formas de pensar, sentir y actuar del grupo. Con respecto a esto, la historia nos ha enseñado que en cualquier tiempo y lugar, existen personas con esta capacidad; sin embargo, no siempre lo hacen del mejor modo.
En inglés, existe una norma general según la cual debemos evitar dar pasos en falso a la que llamanfaux pas. Se trata de un protocolo a la hora de saludar gracias al cual, si lo seguimos, nos evitaremos situaciones comprometidas que podrían resultar descorteses de cara a un inglés o inglesa.
De este modo, entre los británicos la forma más típica para saludarse es un simple apretón de manos, tanto al presentarse como al despedirse. Este gesto se suele emplear en todo tipo de contextos, desde quedadas sociales entre amigos hasta reuniones de negocios, cuyo contexto es obviamente mucho más formal. También se usa entre hombres y mujeres de manera indistinta. Se trata de apretones suaves, no fuertes y estrechos como los que suelen dar los españoles.
En contextos que requieren mayor formalidad, no es de extrañar que el inglés espere, cuando se trata de un saludo entre un hombre y una mujer, que sea ella quien dé el primer paso. Además, es importante mirar a los ojos de la otra persona mientras estamos estrechando su mano. Habitualmente, en inglés suelen decir How do you do?, aunque si estamos conociendo a alguien por primera vez, es común decir simplemente Hello, I am… y nuestro nombre de pila.
Para despedirse, es común en Londres decir un simple Cheers, forma que también se utiliza como alternativa a Thank you para dar las gracias, por ejemplo, al conductor cuando bajamos del autobús.
Entre los jóvenes y adolescentes, es habitual que enseguida nos llamen por nuestro nombre de pila, pero esto no debe tomarse como un signo de amistad, sino como una simple forma de romper el hielo. Esto es igual en otros países europeos entre las personas más jóvenes, ya que habitualmente no suelen ser situaciones que se den en contextos formales. Darse un abrazo también es bastante frecuente, dependiendo del grado de confianza entre amigos.
En cambio, si interactuamos con una persona mayor, esto suele cambiar. Al igual que en España, por ejemplo, se tiende a hablar de usted, en el Reino Unido será más apropiado dirigirse a nuestro interlocutor con la forma Mister para hombres y Miss para mujeres seguida de su apellido. En contextos aun más formales, podría suceder que empleasen las formas Sir/Madam para dirigirse a nosotros, algo que tendremos que emplear nosotros también.
Como decíamos anteriormente, los británicos no son demasiado cercanos, por lo que en las relaciones interpersonales emplean siempre cierta distancia. Tocar a nuestro interlocutor no será demasiado acertado si estamos hablando con un inglés o inglesa.
A quienes tocan el brazo o la espalda de su interlocutor cuando hablan se les suele llamar back slappers y es un gesto que puede llegar a incomodar en gran medida a la otra persona. En resumen, los ingleses no tienden a mostrar su afecto en público, sino que prefieren reservárselo para contextos más familiares e íntimos.
Puesto que a los británicos les gusta mantener las distancias y tener su espacio durante una conversción, por lo general nuestro consejo es no ponerse demasiado cerca de nuestro interlocutor mientras conversamos con él o ella. Además, mostrar interés y mirar directamente a los ojosserán gestos muy apreciados.
Por el contrario, quedarse mirando fijamente a alguien si vamos por la calle o estamos dentro de un local, algo que en inglés llaman standing, se suele considerar de mala educación y, además, suelen darse cuenta con frecuencia. Nuestro consejo: discreción ante todo.
Un gesto al que se le debe prestar especial atención es hacer una “V” con los dedos índice y medio separados, como si indicásemos el número dos. Aunque solamente se considera de mala educación si mostramos la parte de fuera de nuestra mano y no la palma, la cultura inglesa lo considera como un gesto de desprecio, autoridad e incluso burla.
En inglés, a este gesto lo llaman Longbowman o reversed peace y procede del siglo XV, ya que es un gesto que hacían los arqueros que lucharon contra Inglaterra durante la Guerra de los Cien Años. Según esta leyenda, los franceses, durante la Batalla de Agincourt, amenazaban a los arqueros ingleses con cortarles estos dos dedos, que eran los que usaban para disparar. Cuando los ingleses ganaron dicha batalla, cogieron como costumbre hacer este gesto a modo de desafío.
Si, como ya hemos comentado, el Reino Unido es por excelencia el país de la formalidad y la educación a la hora de interactuar con los demás, el contexto de negocios no podía ser una excepción, sino más bien un claro ejemplo de proverbial corrección.
La evolución del protocolo a la hora de negociar en Inglaterra ha sufrido varios cambios a lo largo de los siglos. Actualmente, el protocolo no se sigue de forma tan estricta como hace unas décadas. Aunque para muchos esto es un indicador de que la cultura inglesa ha perdido “clase”, lo cierto es que simplemente las formas de entablar relaciones comerciales han evolucionado.
Así, en primer lugar, una de las etiquetas más llamativas es la que nos indica que evitemos llevar una corbata de rayas en la medida de lo posible, puesto que podrían interpretar que pertenecemos a algún club o college, muy comunes en todo el país.
Un valor que se mantiene casi intacto aun así es el que se relaciona con la palabra dada: normalmente, las promesas suelen tomárselas al pie de la letra y esperarán de nosotros que las cumplamos. Por tanto, nuestro consejo es tener cuidado a la hora de asegurar la certeza de lo que se dice.
Los ingleses negocian siguiendo una norma tácita que ellos llaman understatement, cuya traducción literal al español es sutileza. En efecto, se trata de negociar siendo claros, pero siempre con ciertas reservas, con “por-si-acasos”. Y esto tiene que ver con lo que mencionábamos anteriormente en relación a las promesas. Los británicos son buenos negociadores, algo que se conoce como “flema británica“, esto es, el carácter apático que se suele observar en su comportamiento.
Como forma de romper el hielo de cara a saludarse, suelen decir How do you do? seguido de un apretón de manos. Para los británicos, el tiempo es muy valiososo y, por ello, la puntualidad es un factor muy importante, por lo que te aconsejamos no llegar tarde a ninguna reunión de negocios. Asimismo, realizar chistes o comentarios jocosos no está demasiado bien visto en este tipo de acontecimientos, por lo que nuestra recomendación es que los dejes para contextos más informales.
También hay que tener especial precaución durante las reuniones de negocios cuando hablamos del Reino Unido en sí, en especial se debe ser muy consciente de que el país cuenta con dos naciones claramente diferenciadas: Escocia e Inglaterra. A los escoceses no les gusta que los llameningleses y a los ingleses no les agrada que se haga referencia a ellos como escoceses, aunque este último caso suele darse con menos frecuencia que el primero.
Cuando un extranjero aprende inglés, es muy común tratar de manera exhaustiva el tema de cómo redactar cartas formales e informales. Dentro de un contexto turístico, puede ser muy interesante conocer muy a fondo esta parte del inglés británico si nuestro próximo destino pertenece al Reino Unido, especialmente si se trata de un viaje de negocios y porque estamos buscando empleo allí.
Al igual que sucede en el canal oral, por escrito los ingleses también tienden a marcar las distancias, algo que se ve en las fórmulas prototípicas que se suelen emplear.
Ya se trate de enviar una carta tradicional o un correo electrónico, las formas no cambian. No obstante, sí que debemos prestar especial atención y saber diferenciar cuándo se trata de un contexto formal y cuando es más informal, puesto que las formas que empleemos en uno u otro serán las que marquen la verdadera diferencia. Así pues, por lo general, si conocemos el nombre de nuestro destinatario, lo ideal sería empezar el escrito con un Dear seguido de su nombre (p. ej.Dear Thomas) y una coma.
Si, en cambio, desconocemos su nombre, podemos poner Dear Sir/Madam o To whom may it concern, aunque estas formas tienden a ser algo más formales. En un contexto de formalidad baja, podríamos poner un simple Hello o incluso Good morning/afternoon/evening (dependiendo de si es por la mañana, por la tarde o a última hora del día). Si el mensaje va dirigido a varias personas, siempre podemos recurrir a la forma Dear all.
No obstante, sí que es cierto que actualmente, dado que el medio más empleado en estos casos es el correo electrónico, los formalismos excesivos están desapareciendo poco a poco. Así, es frecuente poner el simple Hello del que hablábamos en el párrafo anterior o incluso su forma reducida Hi, que sería la forma más informal de todas las mencionadas. Por ejemplo, entre las empresas ubicadas en La City de Londres es habitual empezar los correos diciendo Hi team oGreetings, que significa Saludos.
Para despedirse, por su parte, no siempre usan las formas Yours sincerely (cuando conocemos al destinatario) o Yours faithfully (cuando desconocemos su identidad), sino que existen múltiples maneras de despedirse. De hecho, estas no son las formas más empleadas y, si se usan, es en contextos bastante formales.
Una despedida formal y simple al mismo tiempo es Regards, muy común hoy en día, seguida de tu nombre completo en la línea siguiente. Si el correo requiere un poco menos de formalidad, podemos optar por Best regards, de manera que aportamos un toque de calidez a nuestro escrito. En contextos informales, lo más habitual es terminar con un sencillo Best, aunque la forma preferida en Londres es, sin duda, Cheers.
Publicado por Sandra Fernández Arenas en viajejet.com
via Mark Zuckerberg crea una fundación a la que donará 45.000 millones de dólares.
Hay cosas difíciles de entender.
Ofrecer amistad al que pide amor es como dar pan al que muere de sed.
Ovidio (43 AC-17) Poeta latino.