En el Somontano oscense, a 48 kms. de Huesca, se enclava la villa de Alquézar.
Encaramada a 660 mts de altitud sobre una de las sierras paralelas al Pirineo, el pueblo se integra perfectamente en un impresionante paisaje de calizas modelado por el rio Vero, que ha creado a lo largo del tiempo un cañón increíble para la práctica del barranquismo, acantilados impresionantes, cuevas de arte rupestre …
La majestuosa Colegiata de Alquézar fue declarada Monumento Nacional en 1.931 y la arquitectura y trazado medieval de su casco urbano es Conjunto Histórico Artistico desde 1.982.
Paraíso ornitológico, cuenta además con numerosas rutas de senderismo y b.t.t. enclavados dentro del Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara.
Desde sus numerosos miradores, los amantes de la fotografía podrán captar imágenes de su salvaje belleza y de los campos de almendros en flor que llenan el aire de su aroma en primavera.
Sin duda, visitar este pueblo es obligado para todo aquel que visite la provincia de Huesca en cualquier época del año.
Alquézar. Historia viva
Reconocido entre uno de los Pueblos más Bonitos de España, Alquézar es un pueblo que te encantará, ha sabido conservar su esencia de una manera increíble para ofrecer al visitante una experiencia en su visita.
Colegiata y villa medieval se yergue sobre el Cañón del Río Vero, un enclave único de salvaje belleza en el que todavía es posible retroceder en el tiempo mientras se recorren sus estrechas callejuelas, se cruza la muralla de la Colegiata o se escuchan viejas leyendas de doncellas y reyes moros…
Sobre un impresionante entorno paisajístico se eleva majestuosa la Colegiata, antaño fortaleza y hoy Monumento Nacional. A sus pies se extiende el espeso caserío que surgió a la sombra de una fortaleza musulmana erigida en el siglo IX por Jalaf ibn Rasid.
Tal fue la importancia de este enclave que daría nombre a la villa: al-qásr, Alquézar, la fortaleza.
Declarado Conjunto Histórico Artístico, esta villa ofrece la posibilidad de revivir el lejano pasado medieval al recorrer sus calles y rincones más emblemáticos.
Por ejemplo, el portalón gótico de acceso a la antigua villa o la antigua Plaza Mayor, una plaza porticada donde cada una de las casas cuenta con una solución arquitectónica diferente.
Siguiendo el recorrido de las calles, en lo alto se halla la Colegiata de Santa María la Mayor, emplazada donde antaño estuvo la antigua fortaleza musulmana y que se mantiene inexpugnable, protegida por lienzos de muralla, torres albarranas…
Para viajar en el tiempo
Esta monumental Colegiata ha visto como el trascurrir de los siglos y las diferentes corrientes artísticas, dejaban su huella.
Del primitivo templo románico tan solo se conserva el atrio decorado con capiteles historiados.
Posteriormente, en el siglo XIV se construyó el claustro gótico que aprovecha e integra las arcadas románicas.
La actual iglesia – Colegiata fue construida en estilo gótico-renacentista en el siglo XVI.
Ya se que no es importante pero fue la última excursión que hice con mi padre, antes de fallecer, hace dos años y medio.
Leedlo con cariño porque cada rincón tiene un cariño, una mirada, un recuerdo…. muy importante para mí.